UN LUGAR PARA SOÑAR

UN LUGAR PARA SOÑAR
puesta de sol en la Alhambra

sábado, junio 18, 2011

París: consejos para el turista. TRANSPORTE

Vuelvo hoy a hablar de París para ofrecer un poco de información útil a todo aquel que tenga pensado viajar a la ciudad de la luz próximamente; ya sé que en la red hay multitud de páginas de información y turismo acerca de París, pero, no está de más ofrecer una pequeña guía sencilla, actualizada y desde la experiencia real.

TRANSPORTES

Lo habitual suele ser llegar a París en avión; además de los aeropuertos de Orly y Charles de Gaulle , bien comunicados por autobús de línea, servicio especial de autobús, RER y taxi; lo más económico, y rápido es el metro y RER, aunque más incómodo que el servicio especial de autobuses. Existe la opción de viajar hasta el de Beauvais si viajas con Ryanair; en este último caso, la única opción, a parte del taxi, nada recomendable porque está a 80 km. de París, es la de un servicio especial de autobuses que comunica este aeropuerto con Porte Maillot, en París, y que tiene un precio de 15€ por persona y trayecto. Una indicación más, desde París al aeropuerto, este autobús debe tomarse con una antelación de 3 horas y media antes de la salida del vuelo. Para más información sobre los transportes desde los aeropuertos, esta página os será muy útil, http://www.viajaraparis.com/?page=aeropuertosenparis.php , aunque los precios no están actualizados.
Una vez en la ciudad, lo más cómodo y económico es moverse en Metro y RER, que además están combinados entre sí y para los que un mismo billete es válido. Los billetes también son válidos para los autobuses. Dependiendo de los días que vayáis a permanecer y de los trayectos que penséis realizar, os convendrá más un tipo de billete u otro. También hay que tener en cuenta que la red de transportes de París y la región Ile-de-France está dicidida en 6 zonas:
  • lo que es el área metropolitana es la zona 1,
  • el cinturón que rodea esta zona, pero que ya no es París, es la zona 2 (Boulogne, Saint Ouen, Levallois, La Defense, Saint Cloud, Vicennes...)
  • la zona 3 es para ir a Saint Denis, Fontenay, Sevres...
  • en la zona 4 se encuentra, entre otros, el aeropuerto de Orly y Versalles
  • en la zona 5 está el aeropuerto Charles de Gaulle, Disneyland,
  • y la 6 es útil si pensáis ir a Fontainebleau
Todo ello hay que tenerlo en cuenta, sabiendo dónde vais a estar alojados y por donde os queréis mover para sacar un tipo de billete u otro.
El billete normal, ticket t+, para metro, RER y autobús tiene un precio de 1,70€, pero se pueden comprar 10 billetes a un precio de 12€. Estos billetes permiten moverse por las zonas 1 y 2. Es realmente práctico, sobretodo para moverse en metro y RER, pero si se va a hacer una combinación de metro o RER + autobús, deberemos utilizar 2 billetes
Si vamos a estar una semana o más tiempo y pensamos movernos mucho en transporte público, tenemos la opción de la tarjeta Orange, personal e intransferible, debe ir acompañada por una fotografía. Nos permite movernos ilimitadamente por la zona 1 y 2, de lunes a domingo, y tiene un precio de 18€ . Desde el año 2010, para utilizar esta tarjeta es necesario el Passe Navigo, que tiene un precio de 5€ más, aunque es válido durante 10 años y sirve también para otros servicios, como el alquiler de bicicletas.
Existen otro tipo de abonos, el París visite, para 1, 2 3 o 5 días consecutivos, para las zonas 1-3 ó 1-6, sin necesidad de Navigo, pero sólo son recomendables si realmente se va a utilizar mucho el transporte público. Además, son válidos sólo para días naturales completos. La opción más económica, para un sólo día, es de 8,80€.
Si necesitáis ampliar información: http://www.paris.es/transporte , completa y bastante actualizada, aunque algunos precios han variado.
Un par de detalles más sobre los transportes públicos parisisnos, en especial, metro y RER: todo el mundo habla del buen servicio de este medio de transporte. Es cierto, es rápido, puntual, tiene un horario muy amplio, desde las 5:30 a.m hasta la 1:15 a.m, ampliándose hasta las 2:15 a.m los fines de semana,con un intervalo muy corto, comunica muy bien cualquier punto de la ciudad, tienes estaciones de metro o RER en cualquier lugar... pero es viejo, sucio, bastante maloliente y a veces los trasbordos son infinitos y mal indicados (también los hay muy sencillos). Es cierto que están empezando a hacerse reformas, pero que nadie espere unas estaciones o trenes como los del metro de Madrid.
Y, hablando del metro de Madrid, los trenes circulan en el sentido contrario a los de Madrid y en el mismo sentido que los de Barcelona; ello se debe a que Madrid copió el sentido circulatorio de Londres, mientras que Barcelona, con más sentido común, lo hizo de París.

Pero, si estamos en París como turistas, y lo que queremos hacer es ver la mayor cantidad de monumentos posibles de forma cómoda y rápida, y, no nos importa rascarnos un poco el bolsillo, hay otras posibilid
ades.

Batobus
Hay diversas compañías que realizan cruceros por el Sena con diferentes paradas y similares trayectos, pero yo recomiendo el servicio de Batobus. Esta compañía realiza un trayecto por el Sena desde Tour Eiffel hasta Jardin des Plantes con 8 paradas en Tour Eiffel, Musée d`Orsay, Saint Germain-des-Près, Notre-Dame, Jardin des plantes, Hôtel de Ville, Louvre y Champs Elysées.
El precio, por persona, es de 14€. Las explicaciones se ofrecen en 5 idiomas, incluyendo el español, y te permite subir y bajar cuantas veces quieras al cabo del día en cualquiera de las paradas. La frecuencia máxima es de 25 minutos, los barcos están limpios, y las paradas muy bien situadas para descubrir los monumentos de forma cómoda y rápida. Además, tendrás una vista general de la ciudad diferente desde el barco. No recomendable si vais con carrito de paseo, porque los accesos a los muelles son a través de escaleras.

Autobuses turísticos
Hay varias compañías que realizan trayectos turísticos en autobuses de 2 plantas, con la parte superior al descubierto, por París. Dependiendo de lo que queramos hacer y ver, recomiendo una u otra.
Si lo que queremos hacer es un tour turístico por los principales puntos de la ciudad, una panorámica rápida aunque no totalmente completa, sin descender del autobús, y a un precio económico, lo mejor es Foxity Tour. El recorrido dura 1hora y 45 minutos, y permite ver 40 monumentos, con explicaciones en 9 idiomas, incluyendo el español, por un precio de 14€ por persona (los m
enores de 12 años, viajan gratis, y los mayores de 65 o menores de 25, 12€).
Esta compañía es la única que realiza también recorrido nocturno, al mismo precio y con las mismas condiciones.

Los Cars Rouges hacen un trayecto muy similar al anterior. El recorrido dura 2 horas y 15 minutos, con 9 paradas, en las que se puede descender para realizar la visita y tomar después otro autobús. El billete es válido para 2 días consecutivos, las explicaciones en 9 idiomas, incluyendo e
spañol, y por un precio de 26€ por persona (13€ para los menores de 12 años).

El más completo es el París Open Tour. Esta compañía realiza 4 itinerarios diferentes, con más de 50 paradas que permiten descender del autobús en cualquier momento y volver a subir cuando deseemos. El precio para un día es de 29€, y para dos días 32€, mientras que los niños (de 4 a 11 años) tienen una tarifa única de 15€. Como digo, la ventaja de estos es que el recorrido es mucho más amplio, ya que cuenta con 4 rutas (con el mismo billete se pueden hacer los 4 circuitos) que amplían la visita: la ruta París Gran Tour, recorrido de 2 horas, es similar a la ruta de los anteriores, la ruta Montparnasse - Saint Germain, con una duración de 1 hora, se desplaza por el este de la orilla izquierda y nos acercará al Jardin de Luxembourg, al Pantheon, la Tour de Montparnasse... La ruta Montmartre - Grands Boulevards es la única que accede en este medio de transporte hasta Montmatre para conocer el Sacre Coeur; tiene una duración de 1 hora y 20 minutos, y además tiene parada en el museo de cera y muy cerca de algunos establecimientos míticos y típicos para las compras y el ocio; la ruta Bastille - Bercy, de 1 hora de duración, parte desde la Bastilla hacia Notre-Dame y sigue por le Jardin des Plants hasta el Palais Omnisport de Bercy.

Pero, si lo que de verdad queréis hacer es descubrir y conocer París, siempre que tengáis tiempo, lo mejor es planificar la ruta, acceder en transporte público y después pasear y callejear, disfrutar de las avenidas, los bulevares, los jardines, las plazas, descansad al sol, o a la sombra, en cualquier parque, tomad algo en un bistro, en un café o en una brasserie, mirad escaparates, dejaos llevar hasta el siguiente punto, contemplad los monumentos, mirad hacia arriba de cuando en cuando, y, cuando estéis cansados, regresad a vuestro punto alojamiento en metro para comenzar con nuevos bríos otra ruta al día siguiente.


viernes, junio 17, 2011

Dias de vino y rosas


Anoche, volví a ver un peliculón, "Días de vino y rosas" de Blake Edwards, de 1962. Aunque Blake Edwards para muchos es más reconocido por sus comedias, lo mismo que su protagonista, Jack Lemmon, este es un drama, un auténtico y literal drama sobre el alcoholismo.
Es un descenso a los infiernos del alcohol de una pareja, muy enamorada, capaz de autodestruirse por culpa de la bebida sin querer reconocer el problema. La pareja se convierte en un trío, la botella, o mejor dicho, las botellas empiezan a formar parte de su vida, parte de la pareja. Se empieza bebiendo para divertirse, para celebrar, para disfrutar, y se acaba bebiendo por una necesidad imperiosa de no estar sobrio, de no querer ver la realidad. Se cuentan mentiras a sí mismos, no se quieren reconocer como alcohólicos, lo intentan dejar para volver a caer, engañan a los que les rodean, hasta que en un momento dado, el marido, interpretado por Jack Lemmon, toca fondo y decide, plenamente convencido, iniciar una nueva vida sobrio. Pero, para entonces ha convertido a su esposa en una alcohólica irrecuperable, alguien que ya no quiere volver a estar sobria nunca más, porque no le gusta el mundo cuando está serena, alguien que no quiere ser salvada, una mujer que prefiere perder a su hija antes que dejar el alcohol.
Sinceramente, es tan magnífica como tremenda, y con unas actuaciones soberbias.
Me gustaría que se hiciesen más películas como esta, para que alguno, simplemente alguno, se diese cuenta y pudiese cambiar el rumbo antes de que sea demasiado tarde.
No entiendo a esos jóvenes de ahora que salen, no a divertirse, si no a emborracharse hasta perder el control, hasta no ser dueños de sus actos, fin de semana tras fin de semana. Porque el problema, no es el fin de semana de borrachera, que puede hacernos más o menos daño en el organismo, el problema surge cuando dejas de ser un bebedor social o un bebedor de fin de semana y empiezas a tomarte diariamente una copa o dos para irte más relajado a la cama. Si entonces no sabes parar, puede que pases a necesitar el alcohol para seguir viviendo, y no querrás reconocerlo. Y hablo del alcochol como podría hablar de cualquier otra sustancia que domine nuestra vida.
En los colegios e institutos deberían de volver a poner películas, invitar a los chicos a verlas y que luego hicieran una reflexión. No se trata de moralina, se trata de realidad, y, a veces, lo que no eres capaz de reconocer a tu alrededor, lo haces a través de una pantalla.

martes, junio 14, 2011

Paris: c`est magnifique!

Acabamos de regresar de pasar una semana de vacaciones en París, y , sólo puedo decir aquello tan manido de "Oh la lá, París c`est magnifique.

En serio, París es una ciudad magnífica, pero en el sentido de magno, de grande. Las avenidas, bulevares, plazas, iglesias... son de un tamaño casi vergonzosamente grande, como si toda la ciudad fuera un gran escaparate que quisiera deslumbrar al visitante.
Porque, además, no se puede hablar del centro monumental de París, porque no está restringido a un pequeño área, sino que toda la ciudad alrededor del Sena, tanto en la orilla izquierda, como en la derecha, es bello, clásico, turístico, encantador, sin apenas estridencias, sin casi edificios modern
os que atenten al conjunto, sin estrecheces, como si el tiempo se hubiera detenido hace muchas décadas.

Es una ciudad tan monumental, que una vez allí, y pese a su altura, la Torre Eiffel no te parece tan grande, salvo que te acerques a los Jardines de Marte o sus alrededores, pero, desde cualquier otro punto de la ciudad, aunque visible, no impresiona.


París es una ciudad que parece perfectamente trazada y diseñada por un único urbanista. Desde la Pirámide del Louvre (realizada en tiempos de Mitterrand) y si miramos hacia los jardines de Tullerías, podremos ver perfectamente a través del Arco del Triunfo del Carrusell (época napoleónica) el Obelisco de la Place du Concorde, (mediados del siglo XVIII) les Champs Elysées, el Arc de Triomphe, Porte Maillot y el gran arco de La Defense (nuevamente de tiempos de Mitterrand ), prácticamente 9 kilómetros en línea recta, que hicimos en una sola tarde a pie, dando un paseo.
Y, si tomamos como referencia la Place du Concorde, además de poder divisar todo lo ya citado, si miramos hacia la orilla izquierda del Sena, podremos ver en panorámica la Asamblea Nacional, Les Invalides y la Tour Eiffel.
Si nos acercamos hasta la iglesia de la Madeleine y miramos en línea recta haci
a el Sena veremos el Obelisco de la Place du Concorde, la Asamblea Nacional y les Invalides.
Por supuesto, no hace falta que diga nada de las vistas que se pueden contemplar desde Sacre Coeur o desde cualquiera de las plantas de la Tour Eiffel: todo París a tus pies, con la Torre de Montparnasse rompiendo la estética.
La orilla izquierda, tal vez por ser el origen de la ciudad, no es tan lineal, aunque, desde los Jardines de Luxemburgo hay una espectacular vista del Pantheon, la iglesia de Saint Etienne du Mont (con uno de los interiores más bellos) y parte de las universidades de la Sorbona.

En próximas entradas hablaré de otros aspectos de París, de cómo moverse, qué ver, compras, comidas, precios y más.